En mayo, la Cámara de Representantes aprobó la Ley de Soluciones de Emergencia para la Salud y la Recuperación Económica (HEROES), que incluía un segundo cheque de estímulo para millones de estadounidenses. El Senado se opuso a los 3 billones de dólares del proyecto de ley y decidió no aprobarlo. Después del receso de la cámara en julio, los senadores republicanos presentaron su propio paquete de ayuda, que también incluía un cheque de estímulo. Sin embargo, no sólo los demócratas tenían problemas con el proyecto de ley, sino también muchos republicanos. Debido a todos los puntos conflictivos, las negociaciones en el Senado se han estancado. Esta es una noticia especialmente mala ya que hay un receso en agosto que comienza el viernes y si no se aprueba nada, podrían pasar meses antes de que el cheque de estímulo salga.
Sin embargo, puede haber otra opción para hacer llegar el dinero a los americanos - la Casa Blanca podría tomar el asunto en sus propias manos. Según el Washington Post, la Administración Trump está considerando la "acción unilateral", lo que significaría usar los poderes ejecutivos para pasar por encima del Congreso y crear una ley que proporcionaría alivio económico. Hasta ahora, no se sabe si esa ley incluiría un cheque de estímulo y/o una extensión de los beneficios de desempleo y/o algo más.
Mientras tanto, el Senado seguirá debatiendo su propio proyecto de ley. El punto muerto más grande es el programa de Compensación Federal de Desempleo por Pandemia, que ha estado proporcionando 600 dólares adicionales por semana a cualquiera que reciba beneficios de desempleo. Ha expirado y los republicanos quieren extenderlo pero bajan el beneficio a 200 dólares, mientras que los demócratas quieren que se mantenga en 600 dólares.
Aunque el receso del Senado comienza el viernes, podrían retrasar el inicio del mismo para llegar a un acuerdo. Si lo hacen y se aprueba un proyecto de ley, los estadounidenses verían los cheques salir unos 13 días hábiles después de eso. Si no pueden llegar a un consenso, las conversaciones no se reanudarán hasta principios de septiembre, y los cheques podrían no salir hasta octubre, es decir, a menos que Trump utilice los poderes ejecutivos para sacar una ley.
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