La vida de Shakira está en medio de un torbellino. Los rumores de infidelidad, la separación de Piqué, la mudanza a Estados Unidos, la enfermedad de su padre y en medio de esto, sus problemas fiscales no han terminado.
Esos 17 millones que tiene supuestamente como deuda en España siguen siendo una piedra en su zapato. Más que una piedra, es un peñasco. Ahora se sabe que su equipo legal ha decidido irse a juicio, pues la verdad saldrá a flote.
La cantante quiere demostrar que "sus caderas no mienten" y ella tampoco. Así que dejará el asunto en manos de la ley y espera que le den la razón. Esto se llevará a cabo en un tribunal de Barcelona. Ella está convencida de su inocencia, y quiere seguir el proceso en medio de una mudanza, una separación y su padre delicado de salud.
Este problema viene desde que se fue a vivir a Barcelona, pero ella alega que su residencia principal eran Las Bahamas, es por eso que no debía pagar impuestos en Barcelona, según sus datos, pues no vivía más de seis meses seguidos en ese lugar.